Hoy reseña/crítica/comentario del cómic 47 RONIN de Mike Richardson y Stan Sakai. Todavía de cierta relevancia gracias al estreno en cine de una adaptación muy libre de este famoso relato japonés, la versión en viñetas que Planeta nos presenta puede presumir de ser una de las más logradas del mismo.
47 RONIN de Mike Richardson y Stan Sakai: ***1/2
Si uno siente especial debilidad e interés por la cultura oriental en general y la nipona en particular, historias como la aquí narrada le sonaran al menos lejanamente. Todo arranca en el Japón de 1700 con una disputa de régimen interno entre un Daimio (terrateniente heredero del poder feudal con guerreros a su servicio: samurais) y un funcionario corrupto durante la preparación y aprendizaje del primero de los formulismos y protocolo que deberá mostrar ante la corte del Shogun por parte del segundo. El enfrentamiento acaba en tragedia, pero los soldados bajo la protección del Daimio no dudan del honor de su señor en ningún momento y preparan una venganza a largo plazo que les llevará a ser repudiados como Ronin (samurais sin señor). Aunque jamás llegarán a sentirse como tales dado el honor que debe restituirse a su señor. De este modo y cumpliendo hasta las últimas consecuencias las directrices del Bushido (código de honor samurai) los guerreros fieles que cumplirán la demorada venganza serán 47 y la leyenda de su devoción y sacrificio se propagará inmediatamente por todo el país y finalmente el mundo a lo largo del tiempo.
Mike Richardson es el fundador de Dark Horse y un guionista consumado que tenía en mente este proyecto desde hace décadas. La pasión y cariño que rezuma su adaptación dan testimonio de su respeto por la obra. Pulcro y detallista pero también directo y sobrio, Richardson ejecuta un libreto que bebe las fuentes de la narrativa polifónica japonesa, presentando el relato en boca de un tercero y a modo de flashback desarrolla toda la trama de modo lineal. De esta manera nos cuenta una historia dentro de otra, cerrando cíclicamente el círculo del honor con una hermosa y sentida reflexión sobre el poder de la convicción y el deber en la cultura japonesa de la época. El guía y asesor artístico en labores de escritura del proyecto es nada menos que Kazuo Koike (recordemos la fundacional EL LOBO SOLITARIO Y SU CACHORRO), pero el punto fuerte de esta versión en cómic de 47 RONIN viene de la mano de su dibujante, Stan Sakai. El popular mangaka lleva años cultivando con éxito la serie USAGI YOJIMBO y su maestría narrativa en la puesta en escena, la diagramación, la definición de caracteres o la aceleración o ralentización de los tempos en función de la intensidad dramática de las escenas resulta apabullante.
Si hubiera que ponerle una única pega al trabajo sería su terrible brevedad (130 páginas de tebeo que se beben de un trago y que dentro de los cánones del manga ciertamente se antojan como muy pocas) que aunada con la escasez de ramificaciones que presenta respecto al núcleo temático con apenas un par de bellas sub-tramas familiares tan bien resueltas como breves, y la concrección expositiva que el equipo artístico esgrime, dan por resultado poco tiempo de disfrute. Aunque ya se sabe que lo bueno si breve... No obstante la edición que entrega Planeta se ve complementada con numerosos e interesantes extras que logran que nos interesemos más todavía por la fascinante historia de los legendarios 47 RONIN. Muy recomendable.
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