Si DAREDEVIL fue la sorpresa de la temporada pasada (y su continuación la confirmación de que el nivel de calidad no fue casual) en cuanto a adaptación adulta y oscura para televisión de un personaje de cómic, JESSICA JONES es el intento -exitoso hasta cierto punto- de continuar esa senda.
JESSICA JONES TEMPORADA 1 de Melissa Rosenberg: ***
El revival de los superhéroes en pantalla grande y pequeña parecía haber dejado claro que las películas de Marvel (LOS VENGADORES, CAPITAN AMERICA: EL SOLDADO DE INVIERNO, GUARDIANES DE LA GALAXIA) eran las que merecían la pena, mientras que las series de televisión de DC (THE FLASH, THE ARROW, LEGENDS OF TOMORROW) eran las que se llevaban el reconocimiento. Y quizás lo parecía más por su opuestos en forma de mediocres películas de DC (EL HOMBRE DE ACERO) y pobres series de televisión de Marvel (AGENTES DE SHIELD). Pero las cosas no suelen ser blanco o negro y han surgido elementos de ruptura en ambos bandos que hacen mezclarse los límites de esta separación simplista, como la trilogía de EL CABALLERO OSCURO de Christopher Nolan a favor de DC en la gran pantalla o DAREDEVIL y parcialmente JESSICA JONES en Netflix a favor de Marvel en la pequeña. Y es que cuanto un proyecto interesante se aborda con libertad creativa, usando el material primigenio como punto de partida y referencial pero no como directriz limitadora, los resultados suelen ser mucho más interesantes y convincentes que lo que pudiéramos adjudicarles inicialmente.
Es lo que ocurre con la adaptación de JESSICA JONES, que partiendo del personaje con una acertada caracterización de Krysten Ritter, prefiere centrar el arco argumental de esta temporada inicial en su relación y confrontación con el villano Kilgrave, cuya representación por parte de David Tennant resulta convincente y amenazadora. De este modo salta toda la presentación por etapas de Brian Michael Bendis (el guionista original del cómic) para ir intercalando flashbacks y detalles mientras se centra en la persecución del archienemigo. Esto implica una mayor velocidad inicial, pero también una pérdida de estructura complementaria que se suple con la integración una serie de personajes secundarios demasiado innecesarios (los vecinos de Jessica, el grupo de supervivientes de Killgrave, la madre de Trish, el trío lésbico del bufete de abogados) que ralentizan e incluso entorpecen el recorrido central del personaje y solo sirven como forzados nexos de unión argumental para unir las pistas y puntos sobre los diversos misterios adyacentes al villano. Con todo, la habilidad de los guionistas resulta meritoria y el ritmo no decae lo suficiente como para abandonar el show. Motivos adicionales para ello son la acertada banda sonora de Sean Callery, el acertado elenco de actores secundarios con Clarke Peeters, Carrie Anne-Moss y Rebecca De Mornay a la cabeza, y una fotografía excelente con Nueva York en primer plano, que hacen de una resolución poco climática y de un estiramiento algo artificial de su nudo central, motivos menores de crítica. Confirmada la segunda vuelta para 2017, veremos por donde salen, porque el material original más llamativo lo han agotado rápido.
Es lo que ocurre con la adaptación de JESSICA JONES, que partiendo del personaje con una acertada caracterización de Krysten Ritter, prefiere centrar el arco argumental de esta temporada inicial en su relación y confrontación con el villano Kilgrave, cuya representación por parte de David Tennant resulta convincente y amenazadora. De este modo salta toda la presentación por etapas de Brian Michael Bendis (el guionista original del cómic) para ir intercalando flashbacks y detalles mientras se centra en la persecución del archienemigo. Esto implica una mayor velocidad inicial, pero también una pérdida de estructura complementaria que se suple con la integración una serie de personajes secundarios demasiado innecesarios (los vecinos de Jessica, el grupo de supervivientes de Killgrave, la madre de Trish, el trío lésbico del bufete de abogados) que ralentizan e incluso entorpecen el recorrido central del personaje y solo sirven como forzados nexos de unión argumental para unir las pistas y puntos sobre los diversos misterios adyacentes al villano. Con todo, la habilidad de los guionistas resulta meritoria y el ritmo no decae lo suficiente como para abandonar el show. Motivos adicionales para ello son la acertada banda sonora de Sean Callery, el acertado elenco de actores secundarios con Clarke Peeters, Carrie Anne-Moss y Rebecca De Mornay a la cabeza, y una fotografía excelente con Nueva York en primer plano, que hacen de una resolución poco climática y de un estiramiento algo artificial de su nudo central, motivos menores de crítica. Confirmada la segunda vuelta para 2017, veremos por donde salen, porque el material original más llamativo lo han agotado rápido.
Es un placer pasar por su blog Saludos
ResponderEliminarMuchas gracias. Y disculpe el retraso en contestar.
ResponderEliminarSaludos en paralelo.