domingo, 3 de abril de 2011

Cómic: Los Muertos Vivientes 13

La nueva entrega de la saga zombie más popular de los últimos tiempos ya está en las estanterías. Ni que decir tiene que sigue manteniendo un nivel de calidad muy alto, pero quizás me haya decepcionado en parte el devenir de la trama central.

LOS MUERTOS VIVIENTES 13 de Kirkman y Adlard: ***1/2

Lo que se podía entrever como una subversión en los roles de los personajes a los que hemos acompañado desde el alzamiento anunciada en el número previo, queda finalmente en una exploración y alargamiento de la estancia de Rick y los suyos en el nuevo hogar. El esfuerzo por adaptarse, los demonios que atenazan a los que han vivido demasiado tiempo entre los muertos y la lucha por el statu quo, dominan en un volumen con nuevas situaciones límites, análisis de moralidad difusa o el resquebrajamiento gradual de la pequeña sociedad en estado de calma contenida donde se encuentran actualmente. Se intercalan pequeñas escaramuzas, se apuntan ideas inteligentes, se mantiene la tensión. Si a todo. Pero parece deslizarse cierta autocomplacencia dentro del discurso, cierto estancamiento emocional y situacional en los caracteres, quizás propiciado por el contraste con el vertiginoso ritmo de sucesos que venía siendo habitual en la serie, quizás por agotamiento de Kirkman. No obstante el nuevo tomo se devora a velocidad de vértigo como es costumbre y uno queda con inmediatas ganas de más. Veremos que viene a continuación.

2 comentarios:

  1. No. Es la estrategia Nirvana: calma-tormenta-calma-tormenta. Ahora se va construyendo poco a poco la tensión y va a explotar de lo lindo. Kirkman lo ha hecho varias veces y es lógico. Los personajes van cada vez un poco más allá, su psique se va degradando en cada arco argumental cada vez un poco más. Ahora viene una calma muy tensa, esa tensión se masca, y cuando explote irá más lejos aún.

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  2. Precisamente ese empleo de la fórmula ya vista es lo que me parece algo reiterativo, algo desgastado a estar alturas. Es normal que Kirkman estire sucesivamente más las situaciones in crescendo que genera, pero en una serie en la que casi cada nuevo tramo suponía un desafío y una sorpresa, volver a colocar a los personajes en distinto lugar del mismo tablero me parece pedirle poco a la evolución de la misma, quizás por eso me ha parecido que en este número ha habido un ligero descenso de intensidad narrativa y conceptual.

    Pero vamos...deseando estoy ver por donde sale el guionista! Sigue siendo el mejor "continuará" del cómic americano.

    Gracias por tu aportación y saludos en parelelo.

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