lunes, 22 de mayo de 2017

Tv: The Leftovers Temporada 1

Con la tercera (y última) temporada de esta serie ya en marcha, comento la primera, pese a la urticaria inicial que me produce leer el nombre de Damon Lindelof (si, el responsable de los fiascos de LOST y PROMETHEUS) en el proyecto. El libro original en el que se basa y la impecable producción de la HBO hacen que el viaje merezca la pena.

THE LEFTOVERS TEMPORADA 1
de Damon Lindelof y Tom Perrotta: ***1/2

La premisa del relato es puro LOST. Y aunque eso es algo que no tiene por que ser obligatoriamente malo, arrastra consigo el mismo germen de desencanto que nos pudo llevar a soltar sapos y culebras con el devenir de las aventuras temporales deus-ex-machina de los supervivientes isleños. No obstante, y quizás por tratarse de HBO, el producto gira en torno a los personajes y el misterio (desaparece un pequeño porcentaje de la población mundial sin atisbo alguno de explicación al respecto) pasa a segundo plano circunstancial. El drama que se genera en las personas que han perdido a alguien, las consecuencias sociales o las nuevas formas de entender la existencia, son el vehículo con el que explorar el comportamiento humano frente a un hecho inexplicable de alcance global. Cuanto más se centra en profundizar en los personajes THE LEFTOVERS, mejor es el resultado. Cuando los misterios se esparcen sin conexión aparente y más esperamos la carambola narrativa sacada de la chistera, peores expectativas estaremos poniendo en un producto que nace con la convicción dramática como motor intrínseco. Puesto que los caramelos fantásticos (el padre del protagonista y sus conexiones espirituales, los poderes curativos del profeta iluminado) tan solo sirven como cliffhangers sin contexto para enganchar en el parsimonioso y denso -pero impecable- avance narrativo.

La primera temporada de THE LEFTOVERS es una interesante propuesta dramática, tan sólida en su puesta en escena como arriesgada en intenciones. A los que busquen auténtica seriedad sin trucos en la manga les parecerá una tomadura de pelo. A los que quieran un producto cercano al puzzle místico sin duda les decepcionará a largo plazo y posiblemente les aburra en el corto recorrido de sus extensos capítulos (algunos de más de una hora). Pero a los que encontramos en ella un equilibrio meritorio, no nos queda otra que seguir con su siguiente temporada.

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