Hoy comentario/reseña/crítica de la única temporada que llegó a emitirse de modo incompleto (puesto que se canceló una vez puesta en marcha por falta de audiencia que compensase el elevado costo de sus episodios) de FIREFLY y su continuación cinematográfica SERENITY.
FIREFLY de Joss Whedon: ***1/2
Estaba llamada a convertirse en un clásico moderno de la pequeña pantalla si los productores hubiesen aguantado un poco más y las audiencias hubiesen volado a la altura de su fidelización. Pero no fue así, FIREFLY se mantuvo durante 14 episodios y fue cancelada. Pese a todo ya había conquistado demasiados corazones como para sencillamente desaparecer por las buenas y por eso varios años después, tras la venta doméstica de la serie y acaparar una legión de fervorosos fans por internet, su responsable Joss Whedon consiguió financiar una película que diese un apropiado final a tan querido proyecto. Y esa cinta se tituló SERENITY. Y tanto serie con largometraje son una delicia para los amantes de la sci-fi más entretenida, los personajes con gancho, los diálogos chispeantes y las situaciones más enrevesadas resueltas con gracia e imaginación, suspense, fantasía o terror. El elemento alienígena queda descartado y en compensación Whedon nos regala un cruce de aventuras espaciales con el western, asemejando la colonización de otros planetas con la conquista del Oeste. Es de esta divertida mezcla de donde surge el protagonista y auténtico imán del show: Malcolm Reynolds, un sargento de honor perteneciente al bando perdedor de una guerra civil intergaláctica pasada (el previo del piloto nos muestra la batalla final del conflicto en el valle Serenity, nombre de su futura nave y escenario principal) cuya caracterización por parte del simpar Nathan Fillion arranca simpatías desde el primer minuto.
SERENITY de Joss Whedon: ***1/2
Se rodea de un grupo atípico pero entrañable, con Gina Torres como mano derecha y compañera del ejército, Adam Baldwin como dudoso mercernario, Jewel Staite como la joven mecánico, Alan Tudyk como piloto y Morena Baccarin como una "acompañante" (prostituta de lujo en la nueva sociedad galáctica) que otorga a la nave cierta respetabilidad pese a su ocupación habitual: el robo y el contrabando. A ellos se les unen inmediatamente un predicador de pasado oscuro (Ron Glass) y una pareja de hermanos huidos de la Alianza (Sean Maher y Summer Glau). La persecución final de la hermana pequeña debido a sus extraordinarios talentos cultivados artificialmente pondrá fin a la saga en SERENITY, donde se resolverá a la vez uno de los grandes misterios del relato: el origen de los reavers, una nueva raza de humanos transtornados y llevados al límite del salvajismo que pondrán en más de un apuro a los personajes a lo largo de varios capítulos. Caciques en lunas lejanas, robos imposibles, sádicos con acento exótico, situaciones cómicas delirantes, flashbacks, cazarrecompensas espaciales con tendencia a la verborrea delirante y un buen puñado de estupendas tramas más configuran esta magnífica propuesta televisiva coronada por un largometraje igual de disfrutable.
Todo el que sienta cariño por la ciencia ficción y el oeste tiene una parada obligatoria tarde o temprano en FIREFLY y SERENITY. Joss Whedon se las apañó para coger los elementos que más le gustan y hacer un cóctel irresistible con ellos: los juegos con el lenguaje (los personajes espetan en chino y hablan inglés en alusión a la gran fusión comercial de América y China que propiciaría la conquista del espacio, uno de los criminales de poca monta con los que tratan los protagonistas habla en cockney inglés), la historia americana, su facilidad para unos diálogos mordaces y réplicas afiladas o el desarrollo interesante de personajes. Además lo hizo con brillantez tras las cámaras (el plano secuencia de SERENITY con el que presenta a toda la tripulación consigue con más talento e inspiración el mismo objetivo que las abigarradas y digitales composiciones de las dos películas de LOS VENGADORES en sus secuencias climáticas), mostrando su amor por estos caracteres y su búsqueda de libertad. Una delicia que ningún aficionado al entretenimiento de altos vuelos debería dejar pasar.
SERENITY de Joss Whedon: ***1/2
Se rodea de un grupo atípico pero entrañable, con Gina Torres como mano derecha y compañera del ejército, Adam Baldwin como dudoso mercernario, Jewel Staite como la joven mecánico, Alan Tudyk como piloto y Morena Baccarin como una "acompañante" (prostituta de lujo en la nueva sociedad galáctica) que otorga a la nave cierta respetabilidad pese a su ocupación habitual: el robo y el contrabando. A ellos se les unen inmediatamente un predicador de pasado oscuro (Ron Glass) y una pareja de hermanos huidos de la Alianza (Sean Maher y Summer Glau). La persecución final de la hermana pequeña debido a sus extraordinarios talentos cultivados artificialmente pondrá fin a la saga en SERENITY, donde se resolverá a la vez uno de los grandes misterios del relato: el origen de los reavers, una nueva raza de humanos transtornados y llevados al límite del salvajismo que pondrán en más de un apuro a los personajes a lo largo de varios capítulos. Caciques en lunas lejanas, robos imposibles, sádicos con acento exótico, situaciones cómicas delirantes, flashbacks, cazarrecompensas espaciales con tendencia a la verborrea delirante y un buen puñado de estupendas tramas más configuran esta magnífica propuesta televisiva coronada por un largometraje igual de disfrutable.Todo el que sienta cariño por la ciencia ficción y el oeste tiene una parada obligatoria tarde o temprano en FIREFLY y SERENITY. Joss Whedon se las apañó para coger los elementos que más le gustan y hacer un cóctel irresistible con ellos: los juegos con el lenguaje (los personajes espetan en chino y hablan inglés en alusión a la gran fusión comercial de América y China que propiciaría la conquista del espacio, uno de los criminales de poca monta con los que tratan los protagonistas habla en cockney inglés), la historia americana, su facilidad para unos diálogos mordaces y réplicas afiladas o el desarrollo interesante de personajes. Además lo hizo con brillantez tras las cámaras (el plano secuencia de SERENITY con el que presenta a toda la tripulación consigue con más talento e inspiración el mismo objetivo que las abigarradas y digitales composiciones de las dos películas de LOS VENGADORES en sus secuencias climáticas), mostrando su amor por estos caracteres y su búsqueda de libertad. Una delicia que ningún aficionado al entretenimiento de altos vuelos debería dejar pasar.
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