Hoy comentario/reseña/crítica de LA ESTRELLA DE LA MAÑANA, la octava entrega de las aventuras del Capitán Torrezno. Tras el arranque del nuevo ciclo con PLAZA ELÍPTICA, la reconquista del Micromundo liderada involuntariamente por Torrezno, conocerá uno de sus episodios más rocambolescos.
LA ESTRELLA DE LA MAÑANA de Santiago Valenzuela: ****1/4
La inmediata continuación a la llegada de Torrezno a los Jardines Antioquía al final de PLAZA ELÍPTICA, conoce su extraña conquista con la visita no planificada a una estación de combate definitiva situada cerca de dicho bastión. Por azares del destino probablemente marcados, Torrezno se colará en dicha estación y causará con solo descolgar un teléfono y una sucesión de elementos aleatoriamente micro-cósmicos, la rendición de dicha arma. Valenzuela se muestra más directo y lineal en el grueso del relato, que avanza con mayor ritmo y arrojo que el libro anterior. Que la aventura acontezca en un nuevo escenario tan elaborado (con algunas planchas pletóricas de detalles y de un engarzado narrativo de virtuosismo apabullante) y sugerente ayuda a que el gran momento de descalabro alinee en todas las esferas narrativas desde dentro hacia afuera a todos los personajes destacados de la saga -a excepción de Jose Hilario- creando uno de lo clímax más divertidos y espectaculares de toda la saga hasta la fecha.
Al mismo tiempo comienza a desvelarse más y más información acerca de los técnicos, de la inevitabilidad del conflicto inminente y -puede que- definitivo en Babel, así como las vivencias de los nuevos vecinos en la calle Valverde. Todo ello mientras se sigue reflexionando sobre el vaivén existencial o se vislumbran fascinantes imágenes del futuro de Torrezno allende el Micromundo en la segunda parte tras la caída de la Estrella de la Mañana titulada "Las Noches Rojas de Antioquía". Aquí Valenzuela desata su consumada maestría con los lápices y entrega la cumbre pictórica de Torrezno hasta la fecha, con una sucesión tan apabullante como inabarcable de planchas burbujeantes de imaginación, fantasía, creatividad y genio. Solo por ellas LA ESTRELLA DE LA MAÑANA merecería ser considerada un volumen fundamental de la serie.
La editorial Panini sabiamente recogió el testigo de Ponent, haciéndose cargo de no solo este nuevo tomo de Las Aventuras del Capitán Torrezno, sino de la distribución de todos los anteriores incluido el imponente cofre de DEENEIM. Además mantiene el formato y precio pese a incluir mayor número de páginas. Una salva de aplausos para ellos. Y todas las loas y alabanzas imaginables para este volumen. Absolutamente extraordinario.
La inmediata continuación a la llegada de Torrezno a los Jardines Antioquía al final de PLAZA ELÍPTICA, conoce su extraña conquista con la visita no planificada a una estación de combate definitiva situada cerca de dicho bastión. Por azares del destino probablemente marcados, Torrezno se colará en dicha estación y causará con solo descolgar un teléfono y una sucesión de elementos aleatoriamente micro-cósmicos, la rendición de dicha arma. Valenzuela se muestra más directo y lineal en el grueso del relato, que avanza con mayor ritmo y arrojo que el libro anterior. Que la aventura acontezca en un nuevo escenario tan elaborado (con algunas planchas pletóricas de detalles y de un engarzado narrativo de virtuosismo apabullante) y sugerente ayuda a que el gran momento de descalabro alinee en todas las esferas narrativas desde dentro hacia afuera a todos los personajes destacados de la saga -a excepción de Jose Hilario- creando uno de lo clímax más divertidos y espectaculares de toda la saga hasta la fecha.
Al mismo tiempo comienza a desvelarse más y más información acerca de los técnicos, de la inevitabilidad del conflicto inminente y -puede que- definitivo en Babel, así como las vivencias de los nuevos vecinos en la calle Valverde. Todo ello mientras se sigue reflexionando sobre el vaivén existencial o se vislumbran fascinantes imágenes del futuro de Torrezno allende el Micromundo en la segunda parte tras la caída de la Estrella de la Mañana titulada "Las Noches Rojas de Antioquía". Aquí Valenzuela desata su consumada maestría con los lápices y entrega la cumbre pictórica de Torrezno hasta la fecha, con una sucesión tan apabullante como inabarcable de planchas burbujeantes de imaginación, fantasía, creatividad y genio. Solo por ellas LA ESTRELLA DE LA MAÑANA merecería ser considerada un volumen fundamental de la serie.
La editorial Panini sabiamente recogió el testigo de Ponent, haciéndose cargo de no solo este nuevo tomo de Las Aventuras del Capitán Torrezno, sino de la distribución de todos los anteriores incluido el imponente cofre de DEENEIM. Además mantiene el formato y precio pese a incluir mayor número de páginas. Una salva de aplausos para ellos. Y todas las loas y alabanzas imaginables para este volumen. Absolutamente extraordinario.